Puente vanguardista y joyería inca conectan la ciudad
Imágenes de: OOIIO Architecture
El puente peatonal Miraflores-Barranco, unirá estos dos barrios de Lima, en Perú.
El diseño está inspirado en la antigua joyería inca,
en la forma de los cristales que extraen los mineros peruanos y en las
típìcas piñatas latinas en forma de estrella. El puente está concebido
como un edificio al aire libre, por lo que serán las puntas de las
estrellas quienes protejan a los peatones dándoles sombra. Esas puntas
alcanzan gran altura, estilizando el conjunto y dándole una apariencia
muy original. 
OOIIO Architecture pretende que este puente se convierta en uno de los nuevos símbolos de la capital peruana, que no sea solo un lugar de paso, sino una invitación a cruzar de un lugar a otro, un punto de encuentro para todo tipo de viandantes. Esperan que el paso de limeños y de turistas active la vida social del puente y que se provoquen actividades urbanas expontáneas en él.
El puente salvará el importante desnivel que supone la Bajada de Armendáriz y que acaba frente al océano Pacífico. «Es una oportunidad para recuperar paisajísticamente el gran vacío en la ciudad que es la Bajada de Armendáriz, ya que gracias a su forma singular, este nuevo objeto urbano podrá ser visto desde muchos puntos y a la vez servirá para mirar desde él a todas partes. Preside, recupera y da personalidad al corte natural del terreno».
El Puente peatonal está proyectado para finalizarse en el año 2016 en la ciudad de Lima Perú.
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